Blanqueamiento dental en Córdoba. Hoy en día cada vez son más los pacientes que llegan a nuestra clínica dental diciendo “quiero tener mis dientes más blancos”.
El blanqueamiento dental es un tratamiento odontológico, es decir, que no se trata de algo meramente estético, y está dirigido a corregir los defectos de coloración y envejecimientos de los dientes.
Es muy importante realizar un diagnóstico previo con un profesional para controlar que no exista riesgo para las encías, tejidos blandos ni para los dientes.
Un blanqueamiento dental casero puede dañar el esmalte de los dientes e incluso mancharlos, ambas condiciones difíciles de revertir.
El resultado final del blanqueamiento dental en córdoba depende del tono original de tus dientes, la porosidad del esmalte y las técnicas aplicadas, por lo cual es indispensable la correcta evaluación y diagnóstico de cada paciente para prever los resultados.
En gran parte la duración dependerá de tus hábitos, ya que con el paso del tiempo, o por diferentes alimentos que ingerimos habitualmente, nuestros elementos dentarios tienden a adoptar un color más oscuro.
No obstante, el cambio en la tonalidad lograda con dicho tratamiento puede llegar a durar varios años, siempre que el paciente mantenga una buena higiene, realice los mantenimientos y controles periódicos.
La periodicidad del tratamiento para el blanqueamiento de los dientes depende de las exigencias del paciente y de sus hábitos. Se podrá realizar anualmente siempre bajo la supervisión profesional. Es importante conocer que cada esmalte tiene un tono personal por lo cual, el blanqueamiento tendrá un alcance limitado a cada paciente en particular.
1 – Mantener una dieta blanca durante las 24-48 hs posteriores.
2 – Reducir el consumo de alimentos tales como té, café, vino o aquellos con muchos colorantes.
3 – Evitar fumar.
4 – Mantener una correcta higiene bucal.
5 – No usar lápiz labial.
6 – No olvides de realizar una limpieza dental profesional al menos una vez al año.
Consiste en un tratamiento indoloro de aproximadamente 45 minutos de duración, que puede ser combinado con un tratamiento ambulatorio (se continúa en la casa del paciente) con un producto de menor concentración para lograr mayor efectividad y alargar su efecto en el tiempo.
Si se realiza correctamente, blanquear los dientes no produce daños en el esmalte ni en los tejidos blandos. Aunque en pocos casos puede llegar a generar pequeñas sensibilidades que desaparecen en corto plazo.
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